El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Alberto Castro, ha anunciado esta mañana que deja su cargo después de doce años en el mismo. Una decisión necesaria para presentarse a las elecciones autonómicas a las que comparecerá en el número tres de la candidatura del Partido Popular a las Cortes de Castilla y León.
Castro ha querido hacer balance de su gestión, señalando que siempre ha actuado con “honestidad”, con “responsabilidad” y bajo el lema de tener la delegación “con las puertas abiertas” tratando de dar solución a los problemas. El delegado ha recordado los proyectos realizados estos años en la provincia como el Hospital de Benavente y el Hospital Provincial, las reformas del colegio Juan XXIII y la Escuela de Enfermería, el puente de Zamora o la obra del Centro del Lobo Ibérico.
También, ha reseñado que han estado trabajando en unos “años difíciles” de crisis que han obligado a retrasar algunos proyectos, aunque ya, por fin, se ha licitado el centro de salud de Parada del Molino y se ha avanzado en la gestión de otros como el Conservatorio de Música, el Centro Cívico o el Centro de Día de Autismo Zamora.
Por último, el delegado ha hecho hincapié en la buena valoración de la educación, ya que “Zamora es de las primeras de Castilla y León y se están manteniendo centros abiertos con tres alumnos”, los servicios sociales “que a pesar de la crisis somos la Comunidad Autónoma mejor valorada” y la sanidad de la provincia que “cuenta con los mejores profesionales y comparado con otras provincias la mejor lista de espera”, aunque también ha reconocido problemas a la hora de cubrir las vacantes.
También ha querido reseñar el grave problema del desempleo al que se ha destinado un gran “esfuerzo” desde la Junta de Castilla y León mediante subvenciones o buscando financiación a determinados proyectos.
Tras la renuncia de Castro, será la secretaria territorial Carmela Rodríguez Maseda quien ostentará el cargo en funciones.