La Subdelegación de Gobierno ha acogido esta mañana una mesa de trabajo sobre trata de seres humanos. En encuentro en el que se ha puesto de manifiesto que poco a poco van desapareciendo los prostíbulos y que el ejercicio de la prostitución se ha trasladado a pisos.
Desde la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituta se ha señalado a través de su portavoz, Blanca Rubio, que Benavente y su comarca se ha convertido en uno de los puntos más conflictivos respecto a delitos como la trata de seres humanos y la explotación sexual.
La asociación ha detectado hasta ocho pisos en Benavente donde se ejerce la prostitución. El año pasado, además, detectaron dos casos de trata de mujeres obligadas a ejercer la prostitución.
La Fiscal de Extranjería, Beatriz Rubio, por su parte, ha señalado que todos los años se judicializan uno o dos casos de trata de seres humanos, la mayor parte de las ocasiones mujeres obligadas a prostituirse. Citó la fiscal el caso detectado el año pasado de un matrimonio forzado entre gitanos rumanos asentados en Morales de Toro por el que un hombre permanece desde entonces en prisión como uno de los casos más peculiares de los tramitados en estos años.
Coincidió la fiscal también con la portavoz de APRAMP a la hora de asegurar que la comarca de Benavente es la que más casos de trata de seres humanos registra.
