La eterna competición entre el coreano Samsung y el estadounidense Apple llega otra vez a la sociedad. El iPhone 8 y el Samsung Galaxy S8 se disputan una vez más el liderazgo del mercado de los dispositivos móviles, el cual está reñido un año más.

No obstante, ¿es un modelo mejor que el otro? ¿Cuáles son sus diferencias, y cuáles son sus semejanzas? En este artículo vamos a desvelar los entresijos que hacen a los usuarios decantarse por uno u otro smartphone, basándose en sus características principales.

En rendimiento es Apple quien se lleva la palma

Apple vuelve a superar a sus competidores en lo que a rendimiento se refiere con el iPhone 8. La capacidad de renderización y comportamiento del sistema iOS gana a Android, algo que hace decantarse a los usuarios a la hora de escoger entre comprar uno u otro.
Aun así no hay que olvidarse de que el Samsung S8 tiene una gran capacidad, y este año han mejorado bastante en este sentido.

La capacidad de almacenamiento es, un año más, más amplia en Samsung

Si en algo falla Apple al crear sus iPhone es en la capacidad de almacenamiento. En la compañía estadounidense basan su negocio de almacenamiento en que los usuarios puedan comprar más espacio si lo requieren de forma económica, pero aquí es donde Samsung les adelanta.

El Samsung S8, además de incluir una ranura por donde insertar una tarjeta de memoria micro SD para ampliar la capacidad, cuenta con más gigas.

Si elegimos un móvil por su cámara, la mejor opción es el Samsung S8

El ganador un año más es Samsung. El iPhone 8 incorpora una cámara dual para intentar llegar al rendimiento que ofrece el Samsung S8, pero aun así los coreanos vuelven a adelantarse.

En lo que más se equiparan es en la cámara frontal, con 7 MP frente 8 MP respectivamente.

La autonomía de la batería preocupa a ambas compañías

Apple lleva unos cuantos años sacando productos cuya batería parece sufrir percances al paso de los meses, y por ello trabajan para mejorarlo en esta y nuevas versiones del iPhone 8. Pero si a alguien le preocupa y de verdad este tema es a Samsung, con la crisis que tuvieron el pasado año de las baterías que explotaban.

Parece que esta vez ambas empresas se han puesto las pilas, y nunca mejor dicho, para mejorar este apartado fundamental.

Un diseño bastante parecido, pero con preferencias para cada usuario

La forma de hacer los móviles que tienen Apple y Samsung es realmente muy parecida. Son smartphones alargados, claros y con pantallas bien definidas. Sin embargo los iPhone siempre tiran de diseño exclusivo, que no tienen otras marcas, con el botón de inicio en la parte baja de la pantalla y exclusiva ranura para el cargador.

Por otra parte el Samsung S8 tiene la pantalla más estirada que el iPhone 8, llegando a confundirse incluso con el resto de la carcasa. Su grosor es también menor al del iPhone e incluyen el lector digital de la huella en la parte trasera.

Por último, en lo que se asemejan ambos modelos es en que llevan carcasa de cristal y que son resistentes tanto al agua como al polvo.

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