Dirigida a ciudadanos y también a los más pequeños de la casa
La Diputación Provincial ha presentado una campaña provincial de concienciación ambiental sobre la correcta separación de los residuos, y en especial de aquellos que se destinan al contenedor amarillo, que va a llevar a cabo el Consorcio de Residuos de Zamora, en colaboración con Ecoembes. La campaña se dirige a ciudadanos y escolares de la provincia.
El diputado de Medio Ambiente, Javier Faúndez Domínguez, junto con Juan Alonso de Velasco, gerente de Marketing de Ecoembes, la organización que gestiona el reciclaje de los envases plásticos y de cartón y papel en toda España, así como el director provincial de Educación de la Junta de Castilla y León, Fernando Prada Antón, presentaron en rueda de prensa esta campaña, denominada No todos los plásticos van al amarillo, que tiene por objetivo mejorar la información sobre los residuos que se depositan en el contenedor amarillo, y de esta forma incidir en la reducción de los «impropios», que se definen como aquellos materiales depositados erróneamente en el contenedor amarillo). En definitiva, se trata de incrementar la «calidad» de la recogida selectiva y posibilitar una mejora global del sistema de reciclaje de los envases.
Según informó el responsable del área de medio Ambiente de la Diputación, el Consorcio de Residuos de Zamora recogió durante el año 2019 un total de 994.920 kg de envases ligeros de plástico, latas y briks, depositados en los 724 contenedores amarillos instalados en la provincia de Zamora. Sin embargo, en alguna de las localidades de la provincia, se ha detectado un importante volumen de residuos «impropios» en el contenedor amarillo, superando en algunos casos el 30% de los residuos depositados. Estos residuos que no deben ser depositados en él, dificultan su posterior tratamiento; motivo por el cual es muy importante concienciar a la población sobre qué residuos deben depositarse en el contenedor amarillo y cuáles no.
El contenedor amarillo está destinado a la recogida de los envases generados en los domicilios, es decir, en él se deben depositar: envases de plástico (botellas de agua, botellas de refresco, botellas de suavizantes, bolsas de patatas fritas, envases de yogurt, bolsas de plástico de comercio, bandejas de poliespán, etc.), envases metálicos (como latas de refrescos, latas de conservas, bandejas de aluminio, tapas y tapones metálicos de envases de vidrio o de frascos, etc.) y envases tipo brik (como los briks de leche, de zumo, de tomate frito, etc.). Así pues, este es el contenedor de envases, que no de plásticos, ya que cierta parte de la población asocia el contenedor amarillo al de plásticos, y no todos los residuos de plásticos se depositan en el contenedor amarillo, de ahí el lema de la presente campaña.
Entre los residuos impropios depositados erróneamente, se ha detectado la presencia de juguetes (muchos de ellos de plástico), pequeños
