Inmerso en plena competición de la liga Asobal, donde todavía no ha ganado ningún partido y sólo suma un punto, le llega el turno de la Copa del Rey al MMT zamorano. La primera eliminatoria, como suele ser habitual, es a partido único en cancha del equipo de inferior categoría, y al cuadro pistacho le correspondió en su día tener que viajar a Segovia, a la localidad de Nava de la Asunción, después que este conjunto eliminase a Ciudad Real en una previa. El partido está programado para las 21 horas de la noche de este miércoles, día 18.
La cita no llega en un momento especialmente bueno para el cuadro zamorano, cuya atención está centrada preferentemente en sus avatares ligueros. Además, se da la circunstancia que menos de 72 horas después de este partido (el sábado, a partir de las 19-30 horas) recibirán al equipo que le antecede en la clasificación, Logroño, justo antes del parón de la Asobal por las selecciones nacionales, lo que otorga a ese choque una importancia capital.
Aún así, en el club pistacho se concede la importancia precisa a la competición copera y se confía en poder sacarla adelante para disputar la siguiente cita, octavos de final, que sería contra uno de los ocho primeros clasificados en liga de la temporada anterior y además a doble partido. En el MMT son conscientes de las dificultades que va a tener este compromiso de Copa ya que, tradicional e históricamente, sus partidos en el frontón de Nava de la Asunción suelen resultar intensos, muy peleados, a veces ásperos y sobre todo competidos en grado sumo.
Por otra parte, el nivel deportivo del Nava ha subido en la actual temporada dentro de la División de Plata, y su potencial, transcurridas cinco jornadas, le permite estar en plena disposición de luchar por el ascenso. En sus filas hay varios conocidos de la afición zamorana, empezando por su entrenador, David Gordo; en sus filas militan dos exjugadores pistachos, Isma Juárez y Andrés Alonso, aunque ya no está el recordado Alberto Miranda. Continúan siendo piezas claves en su juego hombres como Llopis, Villagrán ó Ajo. Ficharon a un portero llamado Ernesto, conocido por estos lares de su militancia en el Sin Fin cántabro. Y tiene en sus filas al máximo goleador de Plata hasta el momento, Agustín Casado (40 goles en 5 partidos, a una media exacta de 8), jugador hasta mayo pasado de Palma del Río.
El MMT y el Nava son equipos que se conocen mutuamente bastante bien, lo que añade un punto más de dificultades a la resolución de esta eliminatoria. Por si fuera poco, el cuadro zamorano, tras su partido del sábado en Benidorm y el consiguiente viaje de vuelta, apenas ha tenido dos días para preparar este compromiso y tratar de afrontarlo con las mejores garantías. El primer envite de la Copa del Rey, pues, tiene unos cuantos condicionantes para la entidad zamorana que no aportan tranquilidad, precisamente, a su futuro intensivo más inmediato.
