El teatro Ramos Carrión de la capital ha sufrido a primera hora de la tarde un desprendimiento que ha afectado a una de las cornisas de la fachada lateral del edificio.
Los bomberos se han desplazado hasta el teatro para comprobar sobre el terreno la situación de la pared y de los elementos decorativos que hay junto a la zona afectada por el desprendimiento.
Los cascotes cayeron al suelo en torno a las 17,15 horas, apenas quince minutos antes de que se abriera al público el mirador que hay en la parte trasera del edificio, y no provocaron ningún daño.
El desprendimiento sorprendió a los peatones que había a esa hora en el entorno, ya que el ruido causado por los escombros se pudo escuchar fácilmente no sólo en la calle sino en el interior del parador de turismo, como explicaron algunos de los trabajadores del establecimiento. También quienes ocupaban las terrazas cercanas de la plaza de Viriato fueron conscientes de la caída de los cascotes debido al ruido que provocó.
