El Zamarat ha jugado un buen partido ante el Valencia, todo un quinto clasificado en la Liga Femenina. Un encuentro en el que las naranjas han dominado la mayor parte del tiempo y que solo ha cedido en los tres minutos finales, en los que no ha sabido controlar los nervios y el cansancio y ha visto como se le escapaba una victoria que merecía.
El partido empezó muy igualado, aunque poco a poco el Zamarat fue controlando sus nervios y acoplando mejor su juego. Bajo los aros las jugadoras naranjas anotaban con facilidad y el rebote bien cerrado por las jugadoras más altas permitían llegar a ventajas de ocho puntos.
La ventaja al descanso, 31 a 27, se antojaba escasa para los méritos de un Zamarat que fue manifiestamente mejor en los 20 minutos iniciales.
El tercer cuarto, se le atragantó a Zamarat, aunque Valencia tampoco fue mucho mejor. Ambos equipos rivalizaban a la hora de acumular más y más fallos. En los últimos diez minutos, la ventaja de Zamarat se esfumó hasta que a falta de tres minutos para el final Valencia se puso por delante en el electrónico. Zamarat trataba por todos los medios de reducir distancias, pero las penetraciones se encontraban con las torres valencianas bien situadas y los triples se fallaban una y otra vez.
Valencia supo aprovechar mejor los fallos y mantener la distancia en el marcador hasta ese fatídico 59 a 66 final que obliga a las naranjas a tener que puntura en Cáceres la próxima semana, rival directo por el descenso junto con las zamoranas.
Pierre Louis con 15 tantos, Laura Quevedo con 14 y Nelson y Stanacev con 10 fueron las mejoras en ataque para Zamarat, que echó en falta la aportación ofensiva de otras jugadoras.
