Zamora, las calles del casco histórico y el entorno del Puente de Piedra y la Isla de los Conejos, se han convertido por unas horas este sábado en Stalingrado. Miles de personas han disfrutado de una recreación histórica de una de las batallas más sangrientas de la Segunda Guerra Mundial protagonizada por figurante llegados de toda Europa.

A primera hora de la mañana, patrullas de soldados con atuendos pertenecientes al Ejército Rojo y los países del Eje comenzaban a recorrer las calles del centro de la ciudad con sus¡ particular paso marcial. A las once y media han confluido en la Plaza Mayor, donde esperaba una multitud, sobre todo esperando por la llegada de un par de vehículos blindados, que han llenado la plaza de ruido y humo.

Unas palabras del alcalde de la capital, Francisco Guarido, haciendo un llamamiento a la paz y recordando la importancia de la batalla de Stalingrado en la desarrollo de la Guerra Mundial han dado paso a una nueva marcha de los distintos batallones hasta el entorno del Puente de Piedra.

A la una, puntuales, se han desatado las hostilidades entre los dos ejércitos. Los blindados han cruzado el Puente de Piedra para luego más tarde, en la isla de los Conejos protagonizar una batalla “de mentira” pero con un inusitado realismo que ha terminado con la rendición de los soldados que en esta ocasión iban ataviados con el traje del ejército alemán.

Los disparos, el realismo de los trajes, la espectacularidad de los dos vehículos blindados han hecho las delicias de los zamoranos que han abarrotado la zona del Puente de Piedra para disfrutar de una recreación que se repetirá también mañana por la mañana.

 

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