Viti, a falta de cuatro minutos para el final de la prórroga, certifica el ascenso de los azulones
Redacción: Raúl Nieto
Era un día para la historia, y el día acabó siendo histórico. Por la eliminatoria, por el partido, por la fiesta del fútbol zamorano que ha tenido lugar estos quince días, y sobre todo, por el espectáculo que han ofrecido ambos equipos en los más de 120 minutos que duró el enfrentamiento.
El gol de Chechi en el partido de ida daba ventaja a un Villaralbo al que todavía le quedaba sufrir de lo lindo para lograr el ascenso. En el cuadro visitante entró Cordero en el mediocentro para dar más pelea física, y en el cuadro local, los mismos que en el Ruta de la Plata. Con un escenario muy distinto, más estrecho, y con menos ocasiones de gol, el Zamora B saltó mejor. Pudo adelantarse en dos ocasiones que ocurrieron en la misma jugada. En un córner lanzado por Osquitar, Aziz se encontró con una parada in extremis de Miguel del Río, y en el rechace, el propio Óscar envió por encima del larguero. Los villaralbinos por su parte, pudieron adelantarse a balón parado, un recurso que han explotado al máximo en esta eliminatoria, pero el remate de Cepeda se fue por encima.
A partir de ahí, el ritmo bajó, lógicamente, por el calor y por toda la presión de haber un ascenso en juego. Aún así hubo llegadas para ambos equipos, aunque bien es cierto que sin remate. Barbero surtió de pelotas a las bandas del cuadro local para crear peligro exterior, y el Zamora B usaba el comodín de Luis Rivas, que volvió a demostrar que esta categoría no es para el colombiano, para crear el peligro. Precisamente de las botas de Rivas llegó la otra gran ocasión de la primera parte, donde después de romper a Cepeda, puso un centró al que por poco no llegó Jesús Villar, que hubiese empalado a puerta vacía.
En la segunda parte el guion cambió, y, afortunadamente para el espectador, el partido pasó a ser una bellísima batalla. En la primera jugada, Luis Rivas cazó un servicio desde la derecha para batir a Miguel con un balón que entró por la escuadra. Con 44 minutos por delante, el Zamora B empató la eliminatoria. Y seis minutos después, le dio la vuelta. En una falta de entendimiento entre centrales, Jesús Villar se fue en velocidad, se plantó solo en el mano a mano, y batió de nuevo a Miguel. En cinco minutos llegaron los dos golpetazos que bien pudieron ser definitivos para colocar el 0-2.
Pero el Villaralbo es un equipo con mucha experiencia, una experiencia de la que careció el Zamora B. Y con todo en contra, fue capaz de reaccionar. Un balón parado en falta, puesto con música por Raúl Álvarez, encontró la cabeza de Javi Hernández, que mandó a la jaula el esférico para poner el 1-2 que empataba de nuevo la eliminatoria. Con todo en el aire, ambos optaron más por resguardarse, no firmando una prórroga pero tampoco forzando errores que costasen el ascenso. El Villaralbo estuvo más fresco, pero le faltó último pase.
Con los primeros 96 minutos cumplidos, ambos equipos se dieron una primera parte de prórroga de tanteo. Solo un disparo de José Colas desde la frontal pudo traducirse en ocasión, aunque bien es cierto que le tiro, muy muy centrado, no le supuso mayores problemas a Miguel.
Donde se volvió loco fue en la segunda parte. Los de Pablo Gil dieron un paso al frente y el Zamora B empezó a flaquear. Aún así, pasaban los minutos y no llegaba la ocasión para ninguno. Hasta que un centro de Raúl Crespo encontró la cabeza de Viti, que, con todo a favor, envió la pelota fuera para desesperación de la grada local. Faltaban 4 minutos para el final del partido y se pudo pensar que el Villaralbo había perdido la mejor opción de ascender, pero en
La jugada siguiente, una buena pelota al espacio de Ukito encontró de nuevo a Viti que, con templanza, sangre fría y mucha calma, metió la punterita para batir al meta rojiblanco y sellar un ascenso histórico.
El Zamora B por su parte lo intentó, ya más con corazón que con cabeza, y pidió un posible penalti por mano en la última jugada, pero fue imposible. Al final, un 2-2 tras 120 minutos que dejan al Villaralbo merecidamente en Tercera División, y al Zamora B a un pasito de hacer historia. Ahora, toca reflexionar y poner en valor una eliminatoria que pasará a la historia. Y es que, en una comunidad de 9 provincias, llegaron a la final dos zamoranos, algo que, por desgracia, parece que tardará en repetirse.