Los nuevos sabores ya han conquistado los paladares de zamoranos y visitantes
Comer un helado está al alcance de cualquier persona independientemente de si tiene una intolerancia alimentaria o alguna alergia en la heladería zamorana La Valenciana. Un establecimiento famoso en la ciudad por su calidad y variedad de helados.
“Cualquiera puede consumir aquí un helado y no solo los típicos sabores clásicos. En La Valenciana tenemos una gran variedad de sabores para personas que tengan alguna alergia o intolerancia alimentaria, también hay sin azúcar, veganos y para personas celiacas”, explica Ana, encargada del establecimiento.
Sabores que sorprenden y que cada año se reinventan como la nata-fresa, la vainilla negra, dragon fruit o la tarta de queso con mango para ofrecer así más variedad a sus clientes.
Una carta que se ha ampliado también en los helados clásicos con lactosa a los que se ha incorporado la tarta San Marcos o la tarta Banoffee. Además, de recuperar sabores demandados como el pistacho o la avellana descarada.
Sabores nuevos que gusta probar, aunque si hay que quedarse con el mejor, Ana lo tiene claro: “el helado de nata es el mejor”. Aunque no puede desvelar cuál es su secreto. “Su receta es secreta, lleva en la familia de La Valenciana muchos años y no se encuentra en otro sitio igual”, expresa.
Unos helados que vuelan cada día de los expositores ante la gran afluencia de zamoranos y visitantes que muchos días guardan pacientemente la cola que sale a la calle para degustar su helado.
