La sentencia asegura que la valoración del material probatorio “genera importantes dudas en relación a los hechos que deberían constituir la base de las acusaciones”
La Audiencia Provincial de Zamora ha absuelto a un hombre de un delito de agresión sexual continuada a la hija de su pareja, con las que convivía habitualmente, “por contradicciones y falta de coincidencia en las manifestaciones de la víctima y los testigos” a los que ella misma contó algunos de los episodios vividos con la pareja de su madre. El juez asegura en su fallo que la valoración del material probatorio “genera importantes dudas en relación a los hechos que deberían constituir la base de las acusaciones”.
La sentencia no es firme y cabe recurso de apelación ante la Sala de lo Penal de Tribunal Superior de Justicia de Castilla y león.
Tanto el Fiscal como la acusación particular piden 24 años de prisión para el hombre y una indemnización de 15.000 euros.
La joven denunció los hechos vividos con la pareja de su madre a varias de sus amigas y más tarde a la orientadora del instituto. También narró dichos episodios al director del centro educativo. La joven nunca le contó las posibles agresiones sexuales a su madre.
El juez, sin embargo, al analizar esas declaraciones y todas las realizadas previamente a las amigas y a la orientadora, “considera que no concurre la persistencia exigida para tener esa declaración como prueba capaz de desvirtuar el derecho fundamental a la presunción de inocencia”.
“Cuando comparamos las declaraciones encontramos algunas diferencias y omisiones que no nos resultan comprensibles”, subraya en su fallo el juez, que destaca la “falta de coincidencia” entre las declaraciones efectuadas en la Guardia Civil y las manifestaciones de los testigos.
